capitulo 13

 

Eloisa se despierta temprano, Fran duerme a su lado. Eloisa se viste con cuidado para no despertar a su esposo. Luego prepara el desayuno a su hija y la despierta. Mientras Cristina desayuna, Eloisa vuelve al cuarto. Está a oscuras pero entra luz por el pasillo. Busca la falda que se puso el día anterior. Sonríe al pensar en lo que pasó al día siguiente. Está nerviosa por lo que pueda pasar hoy pero por otro lado está muy ansioso por volver a ver a Moisés. 

--hoy será otro día. Seguro que ya nadie piensa en lo de ayer. Fue la novatada... era mi primer día. A partir de ahora todo va a ser normal. Moisés es sólo un niño. Hoy no va a pasar.

Pero en realidad, Eloisa sí desea que pase algo extraordinario aunque no lo acepta. Recuerda a Moisés; su cuerpo desnudo, su beso. Se acaricia el labio:

--me estoy volviendo loca... ¿¿que es lo que estoy haciendo??¿qué?

Fran se despierta. 

--¿¿qué hora es? --pregunta medio dormido.

--temprano... pero me voy a la escuela... ¿llegarás tarde?

--no sé... estoy cansado --dice él aún dormido.

Fran alcanza a ver la falda que su esposa tiene en las manos:

-¿y esa falda? nunca te la habia visto...

Muy nerviosa y sin querer que su esposo se entere de nada:

--me la puse ayer.

--No fuiste con pantalones...?

--si pero es que me manche y me tuvo que limpiar...

--¿te manchaste?¿como?

Eloisa fuerza una sonrisa:

--nada una tontería...

Fran está bastante enojado. No le ha sentado nada bien una noche sin sexo. 

--duerme tranquilo, sobre las 9 y media llega la señora Rosa Alma.

Fran pone muy mala cara:

--no sé porque meter una desconocida en la casa... Me descuidas por tu trabajo...

Fran habla muy flojito y así Eloisa aprovecha para hacer que no ha oido nada. Cierra la puerta dejando a su marido a oscuras, solo y muy molesto. Eloisa se queda ante la puerta con una bolsa con la falda. Suspira. Se acaricia el labio pensando en Moisés. 

El chico se despierta con energía. Por primera vez no hace esperar al despertador y es que tiene muchas ganas de ir a clase y ver a Eloisa. Se siente un hombre y por primera vez ha hecho algo que para él hacen los hombres y lo ha hecho sentir my macho. Ha dormido desnudo. Se levanta que su cama parece una tienda de campaña. Él se siente muy hombre. Se acaricia los genitales bien sonriente y relajado pensando en Eloisa semidesnuda hasta que moja sus manos. Bien relajado llama a Pajarito. El chico está mediodormido.

--¿¿Moisés?¿porque me despiertas?

--ya tenemos que ir a la escuela...

--sí pero siempre soy yo el primero en levantarse.

--es que tengo ganas de ver a Eloisa... se me ha ocurrido una broma buenísima... a ver si hoy le vemos las tetitas y le doy otro beso...

--pues si sigues comportándote como un niño no vas a lograr nada con ella.

Moisés sonríe con orgullo:

--esa vieja se muere por este muñeco que hay aquí. Y yo le voy a dejar que me enseñe todo lo que ha aprendido.... con lo linda que es seguro que tiene todo un curriculum de machos en su cama...

--¿no dijiste que tiene esposo?¿crees que le va a poner el cuerno por ti?

--Yo vi como me miraba... es una viciosita... tú desconfía de mi... ya verás como dentro de poco me hago hombre... Y es que ya estoy saboreando ese cuerpo que yo voy a tener todo para mi... ¡¡que gustazo me va a dar cuando la tenga ahí metida¡¡

--pues te vas a quedar soñando...

--¡¡ya te dije que no¡¡te apuesto lo que quieras Pajarito¡¡

--si por mi mejor... sólo es que no quiero que te hagas ilusiones...

Los dos amigos se despiden. Moisés se levanta desnudo. Se mira de cuerpo entero en el espejo:

--sé que soy un poco joven para ella... pero le gustó... le gustó mi cuerpo... Yo sé como me miró... No se me va a resistir... sólo es seguir provocándola hasta que ella misma me meta en su cama... Pero yo ese gusto me lo voy a dar... luego si desaparece de mi vida mejor... ¡¡pero que yo me revuelco con esa vieja, me revuelco¡¡

Eloisa sale de su casa de prisa y acompañada de su hija. En la puerta se topan con Rosa Alma que estaba apunto de llamar. Casi se chocan.

--¿usted?

--vine más temprano porque me fallo una casa, así me voy más pronto... no le importa...¿verdad?

--claro que no... mi esposo aún duerme asi que espere a que se levanta para ir al cuarto...

Ver a la madre del adolescente en el que no deja de pensar hace sentir culpable a Eloisa pero quiere actuar como si no pasara nada. No quiere aceptar que ese muchachito la ha impresionado más de lo normal. Eloisa se despide de su hija en la puerta del centro. Clemente se acerca a la mujer. 

--¿y qué preparada para un nuevo día?

--sí.. y traje la falda.

Eloisa le pasa la falda al director.

--¿cuando tienes la clase con el grupo de Moisés? Yo creo que sería mejor que fuera yo contigo no sea que se atrevan a hacerte otra groseria...

--yo no les tengo ningún miedo... Yo a Moisés lo manejaré a mi antojo... Ese muchachito no se va a salir con la suya... ¡¡yo lo voy a enderezar¡¡

--¿estás segura? --dice el hombre con una sonrisita burlona.

--totalmente --dice ella.

--bueno, te veo luego por si necesitas algo.

Aunque es discreto sí quiere estar allá, a punto para aprovechar la mínima ocasión de llevarse de nuevo a esa mujer a su cama.

Fran sale de su cuarto desnudo y medio dormido. Rosa Alma tiene el plumero en la mano y se queda boquiabierta a ver a semejante hombre totalmente desnudo:

--¡¡madre mía, menudo papacito¡

Fran se da cuenta de la presencia de la mujer. Se pone las manos en su parte más íntima y se pega en la pared:

--¿¿que hace usted aquí? --pregunta el guapo chico alterado.

Rosa Alma está muy sofocada ya que nunca había visto a un chico tan guapo desnudo:

--¡¡yo trabajo aquí, no lo recuerda¡¡

--¡¡si pero cómo entró¡¡¡se supone que llegaba más tarde¡¡

--¡¡es que me abrió su esposa¡

Fran está avergonzado y muy molesto. Con una mano delante y otra detrás para cubrir su bella desnudez. Rosa Alma sonríe:

--aunque yo quiero mucho a mi Clemente... pero es que un espéctaculo así le fascina a cualquiera...

La mujer ríe pero se pone seria cuando en seguida Fran sale del cuarto. LLeva unos jeans y una camiseta. No dice nada, está enojado.

--adiós, señor --le dice ella.

Avergonzado, él le dice nada y se va.

Eloisa se acerca al aula de Moisés. Él y Pajarito preparan a nueva broma. Nadie de la clase participa. Tienen miedo:

--te vas a buscar un lio y nos lo vas a buscar a nosotros...

--venga, chicos... que como lleve una brusa tan fina como la de ayer el espectáculo va a ser de vicio y nunca mejor dicho.

Todos se sientan a esperar a Eloisa, en especial los chicos que están ansiosos. Eloisa abre la puerta. Ha sido una broma muy elaborada. En la puerta hay atado una fina cuerda que va hasta la mesa, ahí una pistola de agua aguantada con un soporte. La cuerda está atada al gatillo. Está todo preparado para que cuando Eloisa abre a puerta recibe un buen chorreón de agua que le moja los senos. Todos ríen.

--¡¡¡MOISESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS¡¡¡

él se levanta corriendo y es que no se quiere perder el espectaculo. La brusa blancA de Eloisa trasparenta perfectamente los sostenes de ella y se e dibujan a la perfección los senos de ella.

Todos los chicos la devoran con los ojos. Moisés siente que se le va a reventar el pantalón. Eloisa está furiosa.

--vamos a dirección... Los dos juntitos? --dice con ironía.

--¡¡no, esto es algo entre tu y yo¡¡ muchachito¡

a él le molesta el tono en el que le llama muchachito... Se acerca a ella y le susurra a oído:

--yo te voy a demostrar que no soy un niño.

Profesora y alumno se miran desafiantes.